Perder la noción del tiempo: por qué ocurre y cómo detenerlo
Imagínese después de un día ajetreado, con una larga lista de tareas pendientes que apenas ha podido abordar. O durante un periodo monótono, sin estar seguro de en qué día de la semana te encuentras.
Perder la noción del tiempo es el estado de no darse cuenta del paso del tiempo, a menudo causado por estar totalmente absorto o en una actividad o tarea.
Es algo común que le ocurre a mucha gente. Pero, ¿es la sensación de perder la noción del tiempo una mera consecuencia de la procrastinación o hay una explicación científica detrás?
Libro electrónico gratuito: Recupere el control de su tiempo
Obtenga su copia gratuita del eBook sobre gestión del tiempo y descubra cómo aprovechar el poder del seguimiento del tiempo
¿Por qué siento que pierdo la noción del tiempo?
Existen numerosas razones por las que puede sentir que está perdiendo la noción del tiempo, entre ellas:
- estar totalmente absorto en una tarea
- falta de señales temporales externas (para ello, pruebe con un cronómetro en línea)
- tener poca capacidad de gestión del tiempo (consiga una copia gratuita del eBook sobre gestión del tiempo)
- estar mentalmente preocupado o distraído,
- siguiendo una rutina monótona,
- Sentir altos niveles de estrés o presión,
- Falta de motivación o interés por la tarea,
- realizar actividades con escasa información sobre el paso del tiempo.
En los tiempos posteriores al COVID, hay otras dos explicaciones relacionadas con este fenómeno: una está relacionada con el COVID y sus efectos psicológicos en las personas y la otra con las condiciones de salud.
Veamos cómo estos factores pueden explicar por qué está perdiendo la noción del tiempo.
Efectos psicológicos de Covid-19
Como decíamos, hay una explicación psicológica para perder la noción de los días, y parte de ella tiene que ver con las consecuencias de la pandemia de Covid-19
La pandemia de Covid-19 y sus cierres impuestos obligaron a la mayoría de la plantilla a trabajar a distancia.
No había tiempo para que las personas que tenían la costumbre de desplazarse a diario a una oficina se adaptaran a esta nueva realidad. Aunque estuvieras en casa, no tenías adónde ir porque todos los comercios estaban cerrados, pero el trabajo estaba ahí.
Miles de millones de personas han visto cómo las fronteras entre el tiempo de trabajo y el tiempo en casa y con la familia se fundían en una rutina continua.
A esto hay que añadir la ansiedad por la pandemia, el miedo a infectarse y no tener actividades externas que nos distraigan. Muchos acabaron trabajando más horas que en una oficina, al haber eliminado el factor desplazamiento de su vida cotidiana.
Incluso en un momento en que muchas empresas optan por un modelo de trabajo híbrido, volver a un horario estructurado es una lucha. COVID-19 realmente alteró la noción del tiempo de miles de millones de personas.
Es importante señalar que perder la noción del tiempo no es necesariamente malo. Estar concentrado en una tarea y entrar en lo que los especialistas denominan estado de flujo, puede convertirse en una forma productiva y eficaz de trabajar.
Sin embargo, algo bueno puede convertirse en un mal hábito. Si el estado de flujo te hace dejar de completar otras tareas o perderte acontecimientos importantes, tienes que saber cómo controlarlo (lo abordaremos en nuestros consejos).
- Lee sobre la ansiedad por el tiempo.
Condiciones sanitarias
Perder la noción del tiempo también puede ser síntoma de un problema más grave. Puede estar relacionado con problemas de salud mental, como la depresión, y también con el TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad), que a veces puede ser difícil de diagnosticar en adultos.
Esta percepción distorsionada del tiempo se denomina discronometría y se considera una afección médica.
Aunque esta afección puede estar relacionada con la demencia o el Alzheimer, en estos momentos la mayor parte del mundo está dejando atrás los efectos de los bloqueos en nuestras rutinas. Es posible revertirlos y recuperar el control sobre nuestra vida cotidiana.
Un entrenador de TDAH utiliza Timeular para mantener la concentración y evitar el agotamiento.
11 consejos para no perder la noción del tiempo en el trabajo
1. Visite a un médico
Este consejo es el más obvio y el que es "obligatorio".
Como hemos visto, algunos problemas de salud pueden explicar por qué pierdes la noción del tiempo. Así que, para tener una opinión profesional, te aconsejamos encarecidamente que acudas a un médico.
Si ya has visitado a un médico, tenemos otras sugerencias que pueden ayudarte.
2. Crear una rutina y cumplirla
Si durante los periodos de cierre se perdió una rutina más sana o, al menos, más variada, puede ayudar a recuperar esos hábitos previos a la pandemia.
Aunque sigas trabajando desde casa, intenta crear rutinas y rituales asociados a cada día de la semana. Aquí tienes algunas sugerencias que te ayudarán a controlar el tiempo:
- Levántate y acuéstate a la misma hora, todos los días de la semana;
- Si trabajas en modo híbrido, intenta ir a la oficina los mismos días cada semana;
- Toma tus descansos y la hora de comer a la misma hora, todos los días;
- Mantener una rutina matutina constante antes del trabajo (ejercicio, desayuno, ducha, etc.)
- Mantén la misma rutina constante por las tardes, si lo prefieres;
- Cuando trabajes en casa, ordena tu mesa al final del día y guarda las cosas físicamente. Si es posible, trabaja y relájate en espacios diferentes.
CONSEJO: Puede ser una buena idea utilizar nuestra plantilla de horario gratuita para mantener tu rutina.
3. Utilizar estrategias de gestión del tiempo
La gestión eficaz del tiempo tiene varias ventajas. Para mejorar tus habilidades de gestión del tiempo, puedes utilizar algunas estrategias de productividad que pueden ayudarte a aumentar la concentración y la organización del tiempo.
Perder la noción del tiempo, especialmente en los momentos cruciales del trabajo, puede controlarse con algunas de las estrategias más conocidas, por ejemplo, el bloqueo del tiempo. Si no estás familiarizado con este método, quizá te interese saber qué es el bloqueo temporal y cómo se hace.
Otra estrategia popular es la técnica Pomodoro, que consiste en trabajar en bloques de 25 minutos con descansos intermedios.
Las herramientas de gestión del tiempo son muy útiles y ayudan a aplicar estas estrategias de productividad.
Lea también:
¿Qué es la cartografía del tiempo?
¿Por qué es importante la gestión del tiempo?
Citas sobre la gestión del tiempo
4. Reducir el tiempo de pantalla
El exceso de tiempo frente a la pantalla no es un concepto nuevo hoy en día. A las jornadas de trabajo le siguen tardes de atracones de Netflix, de desplazamiento por Instagram o de ver las noticias las 24 horas del día.
El exceso de tiempo de pantalla afecta a nuestros patrones de sueño (una consecuencia de la luz azul), lo que contribuye a que nuestro ritmo circadiano esté desajustado, ya que el día y la noche parecen fundirse.
El ritmo circadiano es un proceso natural que regula nuestros ciclos de sueño-vigilia. Intenta reducir tu exposición a las pantallas al final del día. Si lo haces, le harás saber a tu cuerpo que el ciclo diurno ha terminado y podrás desconectar y recuperarte para el día siguiente.
5. Evitar la multitarea
La multitarea divide nuestra atención y hace más mal que bien.
Varios estudios demuestran que cuando el cerebro cambia constantemente de un foco de atención a otro, sobre todo al realizar tareas complejas, somos más propensos a cometer errores.
Los perjuicios de la multitarea pueden no parecer demasiado dañinos cuando se realizan actividades físicas mundanas. Cuando se trata de tareas laborales o académicas, una capacidad de atención multifragmentada es poco útil y lleva a perder tiempo.
6. Crear un entorno favorable al estado de flujo
Mejore su entorno disminuyendo las distracciones e interrupciones si necesita ayuda extra para realizar una tarea o concentrarse en algo.
Controlar la percepción del tiempo exige centrarse en el momento. Bloquea tu calendario, apaga las notificaciones y pon ruido blanco o marrón de fondo.
¡No dejes que las pérdidas de tiempo te roben el tiempo!
7. Probar un espacio de trabajo diferente
Si trabajas de forma 100% remota, puede ser una buena idea cambiar tu espacio de trabajo o incluso intentar trabajar en una cafetería, una biblioteca o un espacio de co-working, si es posible.
Un cambio de aires te ayudará a superar uno de los principales retos del trabajo a distancia. Tendrás un día diferente sin alterar demasiado tu rutina y te ayudará a desconectar después del trabajo.
8. Aprovechar su cronotipo
¿Es usted una persona madrugadora o nocturna? Cada persona tiene un momento del día diferente en el que se siente más productiva. Es el cronotipo de una persona y depende de muchos factores, como la edad o los hábitos de sueño.
El secreto está en aprovechar al máximo tu cronotipo y programar tus tareas en torno a él, si es posible.
Puedes ser AM-shifted (más productivo al principio del día), PM-shifted (funciona mejor al final de la tarde o por la noche) o Bi-phasic (más productivo al final de la mañana/principio de la tarde y luego de nuevo al final de la noche).
9. Establecimiento de límites
Crear un espacio entre las horas de trabajo y las horas de inactividad es clave. Ayuda a preservar tu salud mental, al ser una de las mejores medidas para evitar el agotamiento.
Apaga el ordenador y guárdalo, desactiva las notificaciones del teléfono relacionadas con el trabajo y no las toques hasta el siguiente día laborable.
Establecer límites contribuye a una concentración y fluidez más intencionadas cuando realizas una tarea.
10. Pasar tiempo al aire libre
El sol ayuda a regular nuestros relojes internos y nos proporciona vitamina D, esencial para reducir los niveles de estrés. Junto con la reducción del tiempo de pantalla, pasar tiempo al aire libre nos ayuda a regular nuestro ritmo circadiano.
Un simple paseo al aire libre cada mediodía puede influir significativamente en la facilidad con la que te duermes por la noche.
El tiempo al aire libre combinado con un poco de ejercicio ayuda a mantener un horario de sueño regular y sólido. Todo junto es bueno para tu salud mental.
11. Reservar tiempo para el autocuidado
Cuidarse no significa necesariamente darse un masaje o salir de compras. Estos pueden ser dos buenos ejemplos, aunque no sean actividades cotidianas habituales.
Si dedicas tiempo a tus obligaciones laborales, dedícalo también a pequeñas actividades que enriquezcan tu vida cotidiana. Meditar, caminar, escribir un diario, leer 30 minutos al día o empezar una nueva afición son algunos ejemplos.
Conclusión
Crear una rutina estructurada es una de las mejores maneras de evitar perder la noción del tiempo.
Sin duda, puedes aprovechar al máximo tu semana laboral y disfrutar de tu tiempo de inactividad, poniendo en práctica hábitos de organización y haciendo lo que mejor se adapte a ti.
Al principio, puede parecer inútil o difícil de gestionar, pero con el tiempo todo irá a mejor.
Vamos a terminar este blog de la misma manera que empezamos, por favor, consiga una cita con un médico.
Quizá le interese: